Estudio de caso: Mejora del tratamiento del agua

Planta de tratamiento de agua en Colombia 

"Esto nos lleva a un nuevo nivel de excelencia en la forma de procesar el agua", dice Álvaro José Henao Ramos, director general de Smurfit Kappa Colombia, refiriéndose a la nueva instalación de tratamiento de agua sostenible de 6,3 millones de euros en la fábrica de papel de Barranquilla.

Esta enorme inversión en dos etapas muestra el compromiso de Smurfit Kappa con el ODS 6: Agua limpia y saneamiento, y con el Mandato del Agua del CEO del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, que abordan la importancia del agua limpia y la acción sobre la escasez de agua. Una evaluación en profundidad realizada en 2017 ya confirmó que el uso de agua de la fábrica no tenía un impacto material en la disponibilidad de agua local. "Actualmente, más del 90% del agua que utilizamos se devuelve a la naturaleza en buen estado, y el agua restante se transforma en vapor o se vincula al producto durante el proceso de producción", explica Álvaro.

Sin embargo, para Smurfit Kappa siempre hay margen de mejora. "Nos centramos en reducir el uso y en mejorar la calidad del agua que vertemos, yendo más allá del mínimo exigido por la ley", dice Álvaro. La nueva planta de tratamiento de aguas residuales reduce en gran medida la captación de agua del cercano río Magdalena y mejora la calidad del agua devuelta. Por ejemplo, la DQO del agua vertida por la planta se reducirá en un 80%, contribuyendo al objetivo de toda la empresa de reducir la DQO en un 60% para 2025.

La planta de Barranquilla produce cartón para contenedores a partir de materiales 100% reciclados. Como dice Álvaro, "Desde hace muchos años, nuestras operaciones se basan en un modelo de economía circular en el que buscamos maximizar la eficiencia de los recursos y minimizar los residuos." La nueva planta de tratamiento de aguas residuales no es una excepción. Se trata de un reactor anaeróbico de última generación y autosuficiente que también generará biogás que podrá utilizarse para alimentar la fábrica, reduciendo la necesidad de fuentes de energía externas. Esto contribuye a nuestro compromiso de cero emisiones netas para 2050.

Barranquilla forma parte de un programa de inversiones que abarca los molinos de papel de Smurfit Kappa en Colombia, y que incluye la mejora de las instalaciones de las plantas de papel de Barbosa y Cali. "El agua es un recurso fundamental para Smurfit Kappa", dice Álvaro, "y estamos contentos de ver cómo nuestras inversiones en el tratamiento del agua en Colombia nos dejan también espacio para el crecimiento."