Munchmallow lleva décadas cautivando a los consumidores y ha formado parte de la infancia de muchas generaciones. La marca buscaba crear una experiencia inmersiva para el consumidor y tuvo la idea de crear un juguete robot utilizando la forma única de la galleta. Como valioso proveedor y aliado de empaque desde hace más de 40 años, nos pidieron ayuda para materializar esta idea.